El jueves 24 de Noviembre de 2021, en el programa de radio del padre Rene Cari, «Buenas Noches América», tuvimos un invitado especial: Juan Segundo Stegman, ex conductor de varios programas televisivos y ahora ferviente devoto de la Santísima Virgen. Nos compartiò su testimonio de conversión y sobre su hermosa Misión con la Virgen, «Por una Argentina de María», que recorre nuestro país, como él dice «llevando palabras de esperanza y de paz, de amor y unidad».

Los jueves como siempre a las 20 hs por FM 89.3 y también por www.radiolobos.com.ar

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A continuación les dejamos unas palabras escritas por Juan Segundo sobre su misión en Argentina:

María, Reina.

Llueve y llueve en esta parte del litoral, llevan acumulados 80 mm en apenas una tarde.
A pesar del diluvio, Nada detuvo a esta Madre que visitó a cientos de hijos en lo profundo del Corazón Correntino.
La devoción en esta parte del país es emocionante: esperas, filas, ofrendas de todo tipo, y lágrimas que hacían de cada parada un momento sagrado.
La Madre parece más bella y llena de gracia cada vez que se adentra en los parajes olvidados, por caminos que son sendas entre Montes de espinillos y busca a cada hijo sabiendo que allí entre pajas y tacuaras hay un oratorio dónde se la venera con inumerables santos. Impresiona ver cuánta devoción Mariana hay en esta provincia. Llevan siglos rezando a la Madre, y lo hacen con una convicción que despierta admiración.
Los hijos escondidos del estero se desvelan por ella.
María, Reina en cada corazón y paraje de Corrientes. Vive en las almas impregnada.
En cada casa una familia la espera, le hacen fiesta ni bien llega, reúne a primos, sobrinos, abuela, y a los hombres más introvertidos, la besan, se estremecen entre lágrimas que parecen explotar con furia de tantas penas acumuladas, dolores de muy adentro salen como afluentes del majestuoso Paraná. Piel de barro, corazones cerrados, ojos vidriosos tan profundos como correntosos. Se conocen, se hablan, María regala belleza y gracias sobrenaturales.
Le dejan billetes de los más humildes, le arman altares con las mejores flores, le cocinan, y en esos instantes parecen morir y al ratito renacen con ella. Son como la tierra reseca que después de la lluvia revive con fuerza.
Todo es agreste, diferente, exótico, y emocionante. Es una parte de la Argentina que enorgullece, se siente la patria representada con sus valores en alto, su gente es un monte de maderas duras, bien arraigado , los pueblos conservan fieles sus tradiciones, el clima es de un contraste fascinante, vivo y cambiante, exhuberancia y sencillez, silencios de siesta y calores abrasadores. Es un grito del porihiaju que resuena en el horizonte anaranjado. Corrientes tiene el campo y la vida.
Los niños la siguen, dejan sus casitas y la siguen, quedan cautivados, ya van como pastores enamorados, quieren servirle. Se van con ella por el camino, tienen 5, 8 11 años.
Los jóvenes formales , distantes y mudos, se muestran espectantes, y está Madre que conoce sus rincones los traspasa a pura mirada, serena y fuerte. Su presencia los conmueve y de repente desmayos, suspiros y llantos de cruz. Que decir? María los busca y como nadie los encuentra.
Los enfermos de todas partes yacen en cuartos oscuros, con sus pesares, postrados, ciegos, mudos, y sordos, se aferran a su Rosario y ponen su esperanza en Ella. Quedan estremecidos cuando toca a su puerta. Vino la Madre.

No tengo más que gratitud, por ser parte de su Misión que levanta corazones y los llena de consuelos. Es apenas una pincelada, la misión y está vivencia viaja muy adentro mío, y no tengo palabras, solo gratitud y emoción.
María Reina, en la Argentina profunda con tal nobleza que va dejando una huella cada vez más honda en sus caminos y en las almas.

Gracias a muchos de ustedes por hacerlo posible. Es la Argentina de María la que vuelve lentamente al Corazón del Padre de la vida.

Paz, Juan Segundo
María, los cuide