La Santa Misa celebrada el domingo último pasado, por los enfermos y afligidos, coincidió con el inicio del primer periodo del año litúrgico cristiano, que consiste en un tiempo de preparación para el nacimiento de Cristo- “Adviento”-.
  La providencia hizo que los fieles coparan las instalaciones de la Parroquia San Vicente Pallotti, sin importarles el temporal de lluvia que azotaba a la zona (record de caída de agua), poniendo todo en manos de Jesús, experimentando un sentido de alegría inmensa, que se transforma en consuelo, paz, abandono, resignación y gozo.
  El testimonio de Roberto, aferrado a su rosario, agradeciendo, que producto de un tumor de esófago y pos tratamiento, se acerco a la Iglesia con mucha fé y está superando su enfermedad, encontrando alivio por medio de nuestro Señor Jesucristo.
  María Fernanda, servidora de la Obra de amor por los que sufren, festejaba, acompañada de su marido Marcelo, 29 años de matrimonio, festejo compartido por la Iglesia, ya que la familia es el pilar fundamental de toda sociedad.
  Al final de la Santa Misa, Dora de 52 años, nacía a la vida de Dios, a la vida espiritual; en su testimonio conto la necesidad e intención de recibir el Bautismo, con mucha fe, y arrepentida de sus pecados, era bautizada por el Parroco.
  El Padre René Cari al escribir la Espada Espiritual de ese día nos decía…” Desde su primera venida el Señor nos enseña cómo tenemos que estar preparados, y en la liturgia de adviento que empezamos hoy nos invita a hacer una verdadera conversión del corazón”.

  Estos testimonios nos conducen e invitan al camino de ser un pesebre viviente, para llevar a Jesús en nuestro interior para siempre.
Paz y bien.
Alexis Cartasegna.