🗡️ESPADA ESPIRITUAL
Jueves 9 de julio de 2020
Lectura del santo Evangelio según san Mateo (10, 7-15): «En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos:
«Vayan y proclamen que está llegando el Reino de los cielos. Sanen a los enfermos, resuciten a los muertos, limpien a los leprosos, expulsen a los demonios; gratis lo han recibido, entréguenlo también gratis.
No lleven oro ni plata ni dinero en el bolsillo; ni morral para el camino, ni dos túnicas, ni sandalias, ni bastón; porque el obrero tiene derecho a su sustento.
Cuando lleguen a cualquier pueblo, averigüen quién hay en él digno de recibirlos y quédense en su casa hasta que se vayan. Al entrar en la casa, saluden, y si lo merecen, la paz de su saludo permanecerá con ellos; si no, regresará a ustedes. Si no los reciben ni escuchan su mensaje, salgan de esa casa o de ese pueblo y sacúdanse el polvo de los pies.
Les aseguro que el día del juicio será más llevadero para Sodoma y Gomorra que para ese pueblo».
En este evangelio Jesús le da el poder a sus discípulos de sanar a los enfermos, de resucitar a los muertos, de limpiar a los leprosos y de expulsar a los demonios. No nos debemos asombrar de estas actividades de sanar a los enfermos y expulsar a los demonios, no es algo nuevo. Muchas veces el mundo nos hace creer que no están bien, pero son obras de caridad pedidas por el mismo Jesús, aunque hoy estén muy olvidadas.
Sin embargo, hay tanta necesidad en estos tiempos… Los apóstoles las pusieron en práctica, los santos de todos los tiempos también, no es algo nuevo.
Los santos liberaron a muchas personas de la acción extraordinaria del demonio, y sanaron a muchos enfermos, porque es un pedido de Jesús.
Hay gente que llegó a curarse con la sombra de San Pedro.
Pidamos a nuestra Madre Santísima que surjan muchas almas que se dediquen a la liberación y sanación. A.M.D.G.